Durante décadas, el embudo de conversión ha sido el mapa oficial del marketing. Lo aprendimos en las universidades, lo aplicamos en agencias, lo replicamos en cada estrategia. Pero, ¿y si te dijera que seguir creyendo en ese embudo es como usar un mapa del siglo XV para navegar el metaverso?
El declive del embudo de conversión no es solo una frase provocadora. Es una realidad que muchos no se atreven a enfrentar por miedo, costumbre o simple inercia corporativa. Y peor aún: continuar usándolo sin cuestionarlo puede estar saboteando tus resultados.
¿Qué es el embudo de conversión y por qué está en declive?
El clásico embudo (awareness → interest → desire → action) asume que los consumidores avanzan por etapas lineales y predecibles. Pero esa linealidad no existe más.
Hoy los usuarios:
- Descubren una marca en TikTok, investigan en Reddit y compran en Amazon.
- Siguen a la competencia antes de comprarte a ti.
- No necesariamente pasan por todas las fases del embudo.
👉 El viaje del consumidor se ha vuelto caótico, multidimensional y emocionalmente impulsado.

5 razones por las que el declive del embudo de conversión es inminente
1. El customer journey ya no es un camino, es un laberinto
Según Google, el 73% de los consumidores interactúan con múltiples puntos de contacto antes de realizar una compra. Esto significa que, antes de tomar una decisión, los usuarios pueden ver un anuncio en redes sociales, buscar reseñas en YouTube, leer opiniones en foros, visitar el sitio web de la marca varias veces e incluso comparar con la competencia en marketplaces.
El recorrido ya no es una línea recta del tipo «ver → interesarse → comprar», como sugiere el modelo tradicional. En su lugar, es un proceso dinámico lleno de saltos entre canales, idas y vueltas entre etapas, y loops donde el consumidor puede regresar varias veces al mismo punto antes de avanzar. Esta complejidad no solo desafía al marketing tradicional, sino que acelera el declive del embudo de conversión, que ya no logra representar con precisión este tipo de comportamiento tan no lineal.
2. La atribución lineal es una fantasía
¿Quién se lleva el crédito por una venta? ¿El anuncio de YouTube? ¿La reseña en Google? ¿El post viral de Instagram? La atribución multicanal mata el concepto clásico de “acción final”. Esta fragmentación en los puntos de contacto es una de las causas más evidentes del declive del embudo de conversión, ya que desmonta la idea de un recorrido lineal y predecible hacia la compra. Hoy, la conversión es un fenómeno distribuido, influido por múltiples canales y momentos que no encajan en un embudo tradicional.
3. El consumidor ya no se deja guiar: investiga, compara y desafía
El 81% de los usuarios investigan online antes de comprar, según Think with Google. El usuario ya no responde pasivamente a la publicidad: la desafía.
4. El embudo no considera la fase post-venta
¿Y la fidelización? ¿La reventa? ¿La recomendación? El embudo tradicional termina en la compra, pero hoy el viaje empieza allí.
5. La IA ha cambiado las reglas
Con IA generativa, recomendaciones hiperpersonalizadas y búsquedas conversacionales, el usuario ya no sigue caminos. Crea el suyo en tiempo real.
¿Qué viene después del declive del embudo de conversión?
El marketing digital necesita nuevos modelos. Algunos ya están surgiendo:
El “Flywheel” de HubSpot
Un modelo cíclico centrado en la retención y el boca a boca como motores de crecimiento. No termina en la compra; se retroalimenta.
Modelos basados en comportamiento predictivo (IA + Machine Learning)
Adiós al embudo rígido, hola a estrategias adaptativas que evolucionan con cada clic y decisión. En el contexto del declive del embudo de conversión, las marcas más innovadoras están apostando por sistemas flexibles, basados en datos en tiempo real y comportamiento del usuario. Ya no se trata de empujar al cliente por un camino predefinido, sino de construir experiencias que se adapten al ritmo y lógica de cada individuo.
La resistencia a aceptar el declive del embudo (y el miedo al cambio)
¿Por qué seguimos enseñando y usando el embudo? Porque es cómodo. Porque da la ilusión de control. Porque es más fácil reportar leads en etapas que explicar un caos organizado. A pesar del declive del embudo de conversión, muchas marcas insisten en mantenerlo como estructura central, ignorando que ya no representa la complejidad real del comportamiento del consumidor.
Pero el marketing de 2025 no necesita comodidad, necesita verdad. Necesita modelos que reflejen la fragmentación, la fluidez y la naturaleza impredecible de las decisiones de compra actuales.
El declive del embudo de conversión es el inicio de una nueva mentalidad
Aceptar el declive del embudo de conversión no es destruir lo aprendido: es evolucionar.
En lugar de forzar a los consumidores a un camino que no siguen, escúchalos, obsérvalos, adáptate. El marketing del futuro no será lineal. Será líquido, emocional, iterativo.
Y tú, ¿vas a seguir persiguiendo leads por un modelo en declive… o vas a diseñar experiencias que se adapten a la nueva realidad?
Checklist para superar el declive del embudo y actualizar tu estrategia
✅ Abandona el marketing lineal
✅ Usa mapas de customer journey dinámicos
✅ Prioriza datos comportamentales, no demográficos
✅ Enfócate en la experiencia post-compra
✅ Combina IA + personalización en tiempo real
✅ Mide más allá del clic: satisfacción, fidelidad, advocacy